24 AÑOS DESPUÉS EL ATHLETIC VUELVE A LA FINAL

La identidad es un tema cada vez más irrelevante en el fútbol, este deporte está marcado por el interés económico, la venta y compra de jugadores, la adquisición de beneficios, menos el fortalecimiento de la identidad, el amor por unos colores y fidelidad a una tradición.
El Athletic de Bilbao, un equipo del País Vasco, que desde su nacimiento sólo tiene jugadores de esta zona de la península Ibérica, volvió, luego de 24 años a una final de la Copa del Rey, el segundo torneo más importante de España.
Hoy derrotó 3-0 al Sevilla en La Catedral del fútbol, el estadio San Mamés de Bilbao y enfrentará en la final de la copa al F.C. Barcelona, que empató 1-1 en su visita al Mallorca y clasificó luego de un triunfo en el partido de ida (2-0).
El Athletic Bilbao representa para el País Vasco la resistencia contra la unificación de España y una identidad que lucha por la independencia vasca. A diferencia de la gran mayoría de clubes del mundo, el Athletic es de los pocos clubes que mantienen una identidad, aún cuando la globalización amenaza por fragmentar o disminuir lo que ha sido una unidad.
El Athletic tiene en su palmarés 24 títulos de Copa del Rey, 8 Copas de Liga y una supercopa, además de un subcampeonato en Copa UEFA. Es el máximo ganador de Copa del Rey en España, pero desde finales de la década de 1980 el poder futbolístico de esta institución ha ido cayendo. Hace una temporada estuvo a punto de descender, aunque ahora continúe siendo uno de los dos únicos equipos que no haya descendido en España a la segunda división.
Hace un mes fue publicada la lista de los 20 clubes más ricos del mundo, el Real Madrid (351 millones de euros en 2008) y el F.C. Barcelona (308 millones de euros), los dos clubes de fútbol más importantes de España ocupaban el primer y tercer lugar respectivamente. El león de Bilbao dejó de ser el tercer equipo en importancia de España porque no tenía la misma ideología mercantilista de los dos grandes.
Ahora el Bilbao vuelve a una final y se reencuentra como en 1984 con un grande, el Barcelona, líder de la Liga y favorito a ganar la Copa del Rey.
El león es desde 2002 una entidad sin ánimo de lucro, esta vez con jugadores como Yeste y Llorente, delantero de la selección española, vuelve, con toda su identidad, a disputar un torneo importante y a reivindicar lo que el interés económico destruyó al relegarlo del primer nivel que lo caracterizó su historia.