martes, 11 de mayo de 2010

HISTORIA DE ESPALDARAZOS Y AGRADECIMIENTOS

Ronaldo, Ronaldinho, Diego y Adriano sólo asistirán al Mundial de Sudáfrica de los álbumes Panini. Apartados de Brasil y condenados por su indisciplina, Dunga deja en el ambiente dos discusiones: o se llevan los más talentosos, pese a sus actos de indisciplina, o se dejan en casa, con sus fiestas y algarabía para que no “rompan” el vestuario en el Mundial.


Juan Camilo Gallego Castro
Tres noches de fiesta derrochó Ronaldinho antes de jugar con el Milán el clásico de la ciudad ante el Inter al finalizar enero. 75 mil euros le costó la pomposa celebración. Tan bien que estaba su nivel futbolístico, que se fue olvidando su pasado nocturno en Barcelona. Estaba jugando más lento pero con el talento intacto, partiendo desde un rincón, bailando en las celebraciones y era inadmisible no verlo en el Mundial. Luego de ese festejo de tres días en un hotel de Milán, ‘Dinho’ se dejó ver en otra cantidad de celebraciones, no volvió a jugar como lo estaba haciendo y definitivamente no fue incluido en la lista que ofreció ayer Dunga. No jugó los últimos partidos de la eliminatoria y tampoco fue llamado a los pasados juegos amistosos de la ‘canarinha’. Ronaldinho fue elegido por la Fifa como mejor deportista del mundo en 2004 y 2005, fue campeón del mundo en 2002 y líder indiscutido del Barcelona vencedor de la Liga de Campeones en 2006. Pero Dunga no sólo le cobró la indisciplina a él.
Adriano estaba tan fijo en Brasil con su buen juego en el Flamengo, hasta que regresó a sus andanzas. Dejó el Inter de Milán para recobrar la alegría. Abandonó momentáneamente el fútbol para volver a su país. Fichó por el Flamengo de Río de Janeiro y con goles ratificó su nivel, pese a no estar en una liga de primer orden. Pero en el ‘Fla’ se hizo inocultable la ausencia del ‘Emperador’ en los entrenamientos. En abril se habló de su posible muerte. Se desapareció varios días e incluso estuvo en una fiesta en una favela de Río. Tuvo una pelea con su novia y esta apedreó el coche del deportista.
¿Qué tanto le puede costar a Dunga el dejar afuera de su equipo a dos de las máximas figuras del fútbol en la última década?
Por fuera de la lista dejó a Ronaldo, aunque él ya había anunciado que no merecía ser convocado, tampoco Diego, a quien le cobraron su mal nivel en la Juventus, ni tampoco el delantero Alexandre Pato, tal vez, la máxima sorpresa, porque los primeros ya habían sido alertados de no ser convocados por su indisciplina.
Tras finalizar el Mundial de Alemania, Dunga ensayó a 84 jugadores en 53 partidos, sólo 10 se mantuvieron desde su primera convocatoria, y del equipo campeón de la Copa Confederaciones sólo dejó fuera al punta Alexandre Pato, al defensa Alex y a los laterales Kléber y André Santos.
Por ser estricto en sus convicciones, Dunga dejó en el aire dos opciones: dejar en su equipo a los más talentosos por motivos personales e incluso deportivos, o excluirlos y buscar otras opciones más “sanas”. El costo de su decisión le puede costar el Mundial, como puede ser la mejor postura como entrenador. El juicio llegará luego del 11 de julio. Por ahora, lo único claro es que el favorito deja un sinsabor en el aire. Ya habrá tiempo de juzgar, no hay nada que hacer.

El héroe de una noche lluviosa
Justo cuando acababa el último partido de Eliminatoria para Argentina, apareció Martín Palermo y anotó el 2-1 que aseguró a su país en el Mundial, y de paso derrotaron a Perú.
La historia de Palermo es sinónimo de agradecimiento. Dio el paso final para la clasificación de su país y es el máximo anotador de Boca Juniors en su historia. Tres cobros penal errados lo condenaron en su Selección. En una nómina donde Esteban Cambiasso, Fernando Gago, Lisandro López, Gabriel Milito y Javier Zanetti fueron excluidos, siendo los mejores de su equipo, lo de Palermo es punto aparte, es la historia del agradecimiento de un héroe que gritó en una noche lluviosa.

Los 23 de Brasil
Porteros:
Julio César (Inter-ITA), Doni (Roma-ITA) y Gomes (Tottenham-ING).
Defensas: Lúcio (Inter-ITA), Juan (Roma-ITA), Luisão (Benfica-POR), Thiago Silva (Milán-ITA), Maicon (Inter-ITA), Daniel Alves (Barcelona-ESP), Michel Bastos (Olympique Lyon-FRA) y Gilberto (Cruzeiro-BRA).
Centrocampistas: Gilberto Silva (Panathinaicos-GRE), Elano (Galatasaray-TUR), Felipe Melo (Juventus-ITA), Ramires (Benfica-POR), Josué (Wolfsburgo-GER), Kléberson (Flamengo-BRA), Kaká (Real Madrid-ESP) y Julio Baptista (Roma-ITA).
Delanteros: Luis Fabiano (Sevilla-ESP), Nilmar (Villarreal-ESP),
Robinho (Santos-BRA) y Grafite (Wolfsburgo-GER).

La locura de Maradona (no incluye a Fernando Gago, Lisandro López, Gabriel Milito, Javier Zanetti ni Esteban Cambiasso):

Porteros:
Sergio Romero (AZ Alkmaar, NED), Mariano Andújar(Catania, ITA) y Diego Pozo (Colón de Santa Fe, ARG).
Defensas: Nicolás Otamendi (Vélez Sarsfield, ARG), Martín
Demichelis (Bayern Múnich, GER), Walter Samuel (Inter, ITA), Gabriel Heinze (Olympique Marsella, FRA), Nicolás Burdisso (Roma, ITA), Clemente Rodríguez (Estudiantes, ARG), Juan Manuel Insaurralde (Newell's Old Boys, ARG), Ariel Garcé (Colón de Santa Fe, ARG) y Fabricio Coloccini (Newcastle, GBR).
Medios: Jonás Gutiérrez (Newcastle, GBR), Juan Sebastián Verón(Estudiantes, ARG), Javier Mascherano (Liverpool, GBR), Angel Di María (Benfica, POR), Javier Pastore (Palermo, ITA), Mario Bolatti (Fiorentina, ITA), José Sosa (Estudiantes, ARG), Sebastián Blanco (Lanús, ARG), Jesús Dátolo (Olympiacos, GRE), Juan Mercier
(Argentinos Juniors, ARG) y Maxi Rodríguez (Liverpool, GBR).
Delanteros: Lionel Messi (Barcelona, ESP), Gonzalo Higuaín (Real Madrid, ESP), Carlos Tevez (Mancheter City, GBR), Sergio Agüero (Atlético de Madrid, ESP), Diego Milito (Inter, ITA), Martín Palermo (Boca Juniors, ARG) y Ezequiel Lavezzi (Nápoles, ITA).

sábado, 6 de febrero de 2010

TRESSOR SÓLO PIENSA EN SU EQUIPO

La historia de los clásicos es, en parte, la historia de la ciudad. Desde hace más de 60 años, Medellín y Nacional dividirán los sentimientos en Antioquia. El último campeón no tendrá a Javier ‘Choronta’ Restrepo, pero debutará el delantero paraguayo Mario Edison Giménez.



Juan Camilo Gallego Castro
jcamilogallego@gmail.com
En la década de 1940, en aquel fútbol prehistórico, el Medellín fue el monarca de los torneos de primera categoría que organizaba la Liga Antioqueña de Fútbol. Huracán era el contrapeso del equipo más popular, pero su nivel tampoco alcanzaba para vencer al ‘equipo de la camiseta que no se destiñe’, como le decían al ‘Rojo’.
Unión Indulana (hoy Atlético Nacional) no era gran protagonista, pues estaba varios escalones abajo del equipo más popular de la región. Llegó el fútbol profesional y el Unión ya era Atlético Municipal y dos años más tarde, en 1950, sería Atlético Nacional.
Es que era el mejor equipo, dicen en ocasiones aquellos ancianos que vieron a ese gran Medellín F.B.C. Cerca de tres años se adueñó de los clásicos regionales y no daba cabida para que el otro equipo de la ciudad hiciera contrapeso.
Las razones: Medellín se caracterizó por ser el equipo popular, el de la gente, y además, tenía los mejores jugadores y ahí ya no hay discusión.
Como en esa época el equipo rojo mantuvo firme su monarquía, desde el 13 de mayo del año pasado el Medellín no cae con Nacional. Mejor fútbol, sumado al último campeonato, es un fuerte argumento para que ‘El Poderoso’ pueda alargar su invicto, acompañado del buen juego.
Y seguro que Tressor Moreno puede ofrecer al partido una cuota de emoción y de seguridad para que los atacantes del visitante de hoy puedan tener opciones claras para anotar.
Hace tres semanas está entrenando en la ciudad y, de verdad, Leonel Álvarez lo ha sorprendido. “Llevaba cuatro años y medio en México y no me había tocado un entrenador que exigiera tanto en cuanto a la parte táctica y que trate de corregir a los jugadores lo que más pueda. Eso es importante porque eso crea una responsabilidad en la cancha y, sabiendo de que todo lo que has trabajado en la semana, no puedes descuidarte un segundo porque te cuesta un partido”, contó este chocoano de 31 años.
Sin Javier ‘Choronta’ Restrepo, el DIM suplirá su ausencia con el joven Juan López, de 19 años, y quien ajustará dos partidos como titular en la mitad de cancha. Seguro serán más compromisos de titular porque el ‘Choro’ estará, por lo menos, tres semanas fuera de las canchas.
“Yo creo que la diferencia se va a notar mucho en el medio. Si llegamos dos o tres veces hay que hacer los goles. Tú le perdonas la vida a un rival en un clásico y de una u otra manera en una jugada pueden sacar la victoria”, aseguró Tressor.
Al chocoano no le gusta hablar del rival y prefiere preocuparse por su equipo. “Uno tiene que tratar de suplir las falencias que uno debe tener en el equipo y no pensar tanto en el rival. El rival cuenta mucho pero es más importante el trabajo que nosotros hagamos en la semana”, argumentó.
Leonel Álvarez contará con el debut del delantero paraguayo Mario Edison Giménez, desplazando a César Valoyes, quien será emergente.
El clásico 261 es fundamental para Medellín. De un buen resultado depende la tranquilidad con la que afrontarán el debut en la Copa Libertadores ante el Cerro Porteño en Paraguay. “La Copa todavía no la vivo porque todavía me espera el clásico”, recordó el hombre de las ideas, Tressor Moreno.

viernes, 29 de enero de 2010

EL BARRENDERO DE LA ZONA IZQUIERDA

Roberto Carlos Cortés, Tressor Moreno, Anselmo de Almeida, José Alejandro Vasco, Lewis Ochoa y Nelson Barahona, las contrataciones del Medellín para 2010, ya fueron ostentados ayer por el presidente Jorge Osorio Ciro, de cara a la Liga Postobón I que comienza hoy. Llegó el debut y el ‘Rey de Corazones’ ya palpita la defensa del título.



Juan Camilo Gallego Castro
jcamilogallego@gmail.com
Es escaso, atípico, extraño y hasta curioso encontrar jugadores que se sientan ligados a un equipo de fútbol. En ocasiones danzan como bailarinas que van de un lado a otro. Algunas veces vuelven a su casa, aunque en otras el interés se limita, solamente, al beneficio económico. Encontrar deportistas de corazón e identificados con un equipo es muy difícil.
“Una vez le dije que porqué no me hacía un contrato vitalicio”, le dijo en una ocasión Roberto Carlos Cortés al presidente del DIM, Jorge Osorio Ciro.
De nuevo en casa, con el equipo que ama, como si tuviera 18 años y fuera a debutar de nuevo, así se siente el lateral antioqueño Roberto Carlos. ¡Cómo no querer al Medellín si es recibido como un hijo!
Al lado de Tressor Moreno, Anselmo de Almeida, José Alejandro Vasco, Lewis Ochoa y Nelson Barahona, Roberto Carlos Cortés fue presentado ayer como una de las seis contrataciones que hizo el Medellín para jugar los tres torneos que tiene que afrontar esta temporada.

Bienvenida sin despedida
“Roberto, especialmente a vos, bienvenido a nuestra institución y ojalá te quedes para siempre”, fueron las palabras de Jorge Osorio Ciro.
Tal vez, una bienvenida sin despedida, para que se quede con el equipo en el que se convirtió en ídolo. El presidente del club, con su acostumbrado carisma quiso, decir la verdad sobre el ‘Choto’ Cortés.
“Pero que cuente la verdad. Él me dice de manera respetuosa ‘Don Jorge’, cuando está más cariñoso me dice ‘enano’. ‘Don jorge, aunque sea de barrendero de aquí no me sacan’”, pronunció el dirigente las palabras que le había dicho tiempo atrás el jugador.
El lateral dejó claro que su deseo es estar en Medellín y el cómo no importa. El corazón es más fuerte que cualquier razón.
“Cuando termine mi carrera como futbolista quiero seguir como técnico, ojalá Dios quiera y se me dé, de morir acá en el rojo”, manifestó el jugador, que como Vasco, Ochoa y Moreno, regresan a una institución a la que están muy ligados. Mientras que Nelson Barahona y Anselmo de Almeida desean escribir una historia importante como la de la quinta estrella del DIM, que ahora es dorada.
“Este Medellín del año pasado comenzó a escribir una historia diferente. Queremos aportar todo lo posible para que el Independiente Medellín llene de gloria y alegría a la hinchada”, manifestó el médico Osorio Ciro. Y dorada será esa estrella en el uniforme, por la campaña y las cifras que acompañaron ese importante título del último campeón colombiano.

Debut ante Santa Fe
“Con Leo (Álvarez) hemos trabajado mucho lo que él pretende en la cancha. La idea básica es que nosotros podamos ser técnicos en la cancha. Ahorita tengo la oportunidad de jugar donde más me gusta”, contó Tressor Moreno, que hoy será novedad en el Medellín.
El campeón aparecerá frente su hinchada a las 8:15 de la noche cuando juegue con Santa Fe. La reaparición de Tressor Moreno, el reemplazo de Juan López por Juan Esteban Ortíz y la vuelta a casa de Roberto Carlos Cortés, son las novedades para el inicio de campeonato. No está confirmado que pueda jugar Nelson Barahona, pues tiene fecha de sanción por acumulación de tarjetas en el Atlético Huila. Sin embargo, el panameño podría actuar si es habilitado por la presencia del volante Javier Calle en la Selección Colombia Sub-20.
Hoy regresa, triunfante y alegre. Roberto Carlos Cortés volverá a jugar como lateral izquierdo porque Juan David Valencia está suspendido. El ‘Choto’ no se imagina la ovación cuando sea coreado su nombre en la tribuna. Va a dejar atrás la ‘mala fama’ que se formó cuando salió por la puerta de atrás del Medellín, porque hay que dejarla “bien enterradita”, pues así sea como barrendero, este lateral quiere quedarse para cuidar eternamente la zona izquierda del Poderoso.

sábado, 9 de enero de 2010

UNA VIDA QUE DESBORDA POR LA FIESTA

En Isla Fuerte la fiesta hace parte de la vida. Los casi 2000 habitantes de esta isla, perteneciente al archipiélago de San Bernardo, en el Departamento de Bolívar, los une la pesca, la tierra, su sangre y la champeta.


Juan Camilo Gallego Castro
jcamilogallego@gmail.com
En la cancha de fútbol de Isla Fuerte hay 22 burras pastando. Son las seis y treinta de la tarde y el sol apenas brinda sus últimos rayos de sol.
El campo fue donado por el gobierno de Andrés Pastrana y está ubicado al lado de El Bonga, el árbol más antiguo y grande de la isla. Tiene 500 años de vida y bajo sus ramas hay un par de enamorados que ven caer la tarde mientras las 22 jugadoras se alimentan para un partido más.
Al otro día tendrán que cargar, caminar y sentir el sol abrasador del Caribe colombiano. Seguro que su fisionomía está dispuesta a soportar con poca agua el trabajo que necesitan hacer los isleños.
Es un sábado, el primero después del fin de año y los habitantes de Isla Fuerte todavía se reponen de la fiesta que terminó hace seis horas, luego de un par de días de intensa euforia, mucha cerveza y desborde incontrolable de caderas, al son de la champeta.
La energía llegó hace 30 minutos y estará durante 12 horas hasta las seis de la madrugada. Los isleños apenas encuentran que funciona la corriente eléctrica prenden sus equipos de sonido. Sofisticados, modernos, tal vez, el principal electrodoméstico de estas familias costeñas. ¡Qué más importante que una buena música y cervezas heladas!
Se escuchan algunos vallenatos, pero retumba la champeta. Muy cerca, en Cartagena, ‘El Celular’ fue una de las canciones que más se escuchó en la celebración de fin de año. Es fin de semana y la rumba no se hace esperar.
“Cuando cogen una canción la queman”, dice una de las isleñas.
Hay una fiesta de quince años. Un par de negros se encargan del sonido, que se escucha desde cualquier lugar de la isla. Con computador, mezclador y potentes bafles la celebración promete ser hasta la madrugada.
Los habitantes están concentrados en el mismo lugar. En la Discoteca La Isla es la fiesta de esta noche. Es en una casa desocupada, con paredes de color naranja y un par de ventiladores insuficientes para el calor que genera el baile, parecido a un rito sexual, por el movimiento de las caderas, muy ajustadas. Es imposible no sentirse.
“En esta Isla todos somos familiares de todos. Todos nos conocemos, por eso hay tanto niño enfermo porque se mezclan las familias”, cuenta uno de los hombres del lugar. Él, sólo tiene que dar un par de pasos para cruzar la calle y estar en la celebración de quince años.
“Por la mañana terminamos la fiesta de fin de año y vamos a seguir celebrando esta noche”, asegura.
El baile es dentro de la casa, la risa y la charla es afuera. No hay hombres y mujeres juntos. Cada uno por su lado y en grupos, esperan la mejor canción para mostrar sus dotes de bailarines del caribe. Ellos tienen sabor y la incitación al sexo se percibe en el aire. Las mujeres desfilan con sus escotes atractivos, pero sus ropas, bien ajustadas a sus caderas, son motivo de atención para los hombres.
“Todo el pueblo está acá”, cuentan.
Toman Costeñita. La casa se llena cuando escuchan una champeta. La discoteca arde de euforia. El movimiento de las caderas simulan el acto sexual. Hombres y mujeres sudan, el movimiento es intenso y todos demuestran estar concentrados. Es fundamental estarlo, la música hay que sentirla, el cuerpo del otro hay que vivirlo.
No hay vals y al inicio de la noche se escuchó “Tú cumpleaños”, de Diomedes Díaz. El resto de la noche no hay fiesta de quince años, no se distingue quinceañera y menos sus padres o familiares más allegados.
Las quince primaveras son la excusa para convocar a los isleños, que no pierden oportunidad ni excusa para vivir como les gusta: en fiesta. Es uno de tantos carnavales que se pueden inventar en Isla Fuerte.
Se ve que la niña no baila, ella no es la protagonista. Ella camina con su vestido azul y reparte en todos los grupos de gente, dentro y fuera de la discoteca, las crispetas que tiene para ofrecer. No se ven regalos, al fin y al cabo lo que pueden ofrecer los isleños es lo que les brinda la tierra y el mar. Ah, pero no falta su alegría, su carisma y su presencia en el epicentro de la isla.
Esta noche quedaron atrás los cultivos de maíz, los árboles de mango, el plátano, el arroz, el coco y la pesca, luego de la fiesta cada habitante de Isla Fuerte se dedicará a sus métodos de supervivencia. Primero el turismo, luego la explotación de los recursos de su isla.
Este pueblo no tiene autos ni motos, menos calles pavimentadas. Los servicios públicos son un lujo, así que cuando llegan se les da el mayor uso posible. Tener baldosa en el piso de las casas es una pompa. Pisar la tierra en una vivienda, vivir entre tablas de madera y bajo hojas de palma como techo, es normal. Las tiendas son carritos de dulces y la carnicería es el mar. El patacón es al desayuno, el almuerzo y la comida, no hay duda, pero la fiesta es donde haya música y se escuche la champeta. Así bailan sus días estos isleños.
Se acabó la cerveza y hay que caminar cinco calles para adquirir más en otra tienda. Algunos toman Aguardiente Antioqueño, un honor en una isla donde los costos de transporte para cualquier producto se incrementan. Llegaron más cervezas. Son las tres de la mañana, pocos han podido dormir y cada vez es más constante que repitan la canción ‘El Celular’. Se escucha una sola voz que dice ‘Aló, ¿dónde estás?, ¿qué pasó? Me apagaste el celular’.
Los niños más pequeños la cantan, están despiertos y son protagonistas de la fiesta. Algunos bailan como los más grandes, pero otros se duermen en la calle, pues llegaron de sus casas para la festividad y en ella amanecen. Sólo el sol puede espantarlos.
Sale gente corriendo de la discoteca, la música la acaban de interrumpir y aclaran que no hay más fiesta o por lo menos no más música.
-Acabamos porque empezaron a pelear y porque no estaban consumiendo-, advierte la mujer que vendía la cerveza.
Ha pasado media hora y a uno de los protagonistas de la pelea ya fue llevado a su casa. Uno de los muchachos que quedan cuenta que son amigos, pero por una cachetada se armó el desorden.
-Él me cacheteó, entonces yo hice lo mismo. Ahí se armó la pelea-, cuenta sonriente el que quiso seguir en la fiesta, pero ya no había forma.
Todos fueron a sus casas, no hay más música y faltan dos horas para amanecer.
Se levantarán a pescar, mirar los cultivos, atender los turistas o esperar qué puede surgir en la Isla.
El próximo sábado habrá fiesta, si en semana no hay otra excusa para convocar a todo el pueblo. Sin duda, son sus tradiciones alegres las que los une.